Entretenimiento

Itatí Cantoral: “También viví propuestas indecorosas en mi adolescencia”

La actriz señaló que Juicio a una zorra va a hacer hablar a la gente sobre los abusos silenciados. Además, tomó como ejemplo el caso de Sasha Sokol

Teatro
“Juicio a una zorra”: el regreso más intenso de Itatí Cantoral al teatro (Foto: Cortesía)

Itatí Cantoral regresa a los escenarios con Juicio a una zorra, un monólogo escrito por Miguel del Arco y dirigido por Alonso Íñiguez. En esta puesta en escena, se reinterpreta el mito de Helena de Troya desde una perspectiva íntima, humana y profundamente feminista. La obra es una conversación urgente entre el pasado mítico y el presente, donde Helena no pide perdón: exige ser escuchada.

La actriz mexicana platicó con Publimetro a días del estreno teatral, y puso sobre la mesa varios pensamientos sobre cómo es enfrentar este monólogo y cómo los abusos siguen impunes en México.

Teatro
“Juicio a una zorra”: el regreso más intenso de Itatí Cantoral al teatro (Foto: Cortesía)

¿Qué te atrajo de esta obra cuando leíste el texto de Miguel del Arco?

—Es una mujer hablándole a hombres y mujeres, pero a través de ella, no de las palabras de otro, y pidiendo justicia. Y yo digo, pues qué bonito, ¿no? Que abramos esta conversación. Si realmente todavía hay equidad de género, ¿no? Y todas estas cuestiones que te haces con esta obra.

¿Cómo fue este proceso creativo junto a Alonso Íñiguez?

—Es muy intenso este trabajo. Tienes que dedicarle 100 por ciento. Alonso es una persona que le gusta mucho dirigir a sus actores, muy respetuoso, te trata con mucho amor. Y a mí eso es algo que me gusta mucho, porque creo que un director es una persona que te tiene que tratar con cariño y con amor, porque es un momento en el que te vas a abrir por completo con él, y él va a querer entrar adentro de ti para poder mover tus emociones y para poder interpretar algo que él quiera, sentimentalmente. Ha sido muy bonito cada uno de nuestros ensayos. He gozado muchísimo, he comido muchísimo y me he reído mucho. También me he desesperado, he llorado.

¿Cómo te preparas para enfrentarlo arriba del escenario?

— Es muy emocional, intenso y desafiante. Pues más que nada intento ponerme en sus zapatos. Y al mismo tiempo, pues eso me hace ponerme en los míos propios. Y sí me conmueve mucho su historia. Y me gustaría defenderla como ella se defiende en la obra. Y sí me gustaría que fuera con ella con quien se acabara el sufrimiento de las mujeres, de escuchar todo lo que sufrió. Entonces, pues más que nada, yo creo que con trabajo, con compasión, con horas de trabajo.

¿El teatro es tu zona de mayor gozo?

—Me divierto mucho con lo que hago, soy una apasionada de lo que hago. Me gusta mucho el teatro, es lo que más me gusta. Amo el teatro y amo mi profesión. La respeto, la amo, la quiero, la admiro. Y como Elena de Troya, la defiendo. Y cuando tengo trabajo, agradezco infinitamente tenerlo.

Y esta Helena que veremos en escena, ¿cómo es?

— ¡Con muchos huevos! Así, literal. Ella nació de un huevo y tiene más fuerza que muchos dioses. Esta Helena no se calla nada.

Reflexiones alrededor del caso de Sasha Sokol

Al preguntarle a Itatí Cantoral cómo conecta esta Helena de Troya con la mujer contemporánea, y si hay paralelismos desde tu propia experiencia como mujer en el medio artístico, ella respondió: “No nada más en el medio artístico. Porque te digo que muchas, la mayoría de las chicas o chicos abusados son de las familias. No es solamente con los actores, los abusos sexuales se dan entre las familias, que eso es lo peor, porque generan culpas, ¿no? Si mi papá es capaz de tocarme, entonces yo soy culpable de que mi papá me toque. También hay centros de autoayuda, porque es una enfermedad. Y eso también es bueno saberlo”.

También opinó sobre el caso de Sasha Sokol y Luis de Llano. “Lo de Sasha… pues que condenen. Pero no nada más habría que condenarlos o condenarlas, sino ver por qué hay tanta pederastría. Y dicen que hay redes, y estamos viendo con el director de autoayuda para la gente que tiene esta deformación, que es una pulsión hacia un menor de edad.

Entonces, es un problema psicológico. Y no tiene nada que ver con Helena de Troya, o con antes de Cristo o después de Cristo. Hoy en día sigue sucediendo. Y en las leyes todavía no nos hemos metido, pero nos hemos dado cuenta de que no tenemos mucha protección en México. Tenemos algunas cuantas protecciones las mujeres, o los niños, o las niñas. Y yo sí quisiera cuestionar por qué no hay una ley donde a los papás no se les cuestione cuando una niña de nueve años, por ejemplo, se casa. ¿Quién autoriza esos matrimonios? Y cómo hay jueces”.

Al final de la charla, compartió si ha vivido algo parecido en su carrera como actriz.

“Yo, desde mi mundo… yo empecé en la adolescencia, que tú me decías, bueno, los artistas… yo era adolescente, y mi mamá no me dejaba ni a sol ni a sombra. Ella era una Helena de Troya. Se peleaba con todas las producciones, y nunca me dejó. Y aun así, por supuesto que tuve propuestas indecorosas. Y me temblaba… y yo: “Ay…”, y dije que no. Pero tuve unos papás también que me dieron esa fortaleza. Mi papá era feminista. Me construyeron con convicciones, con valores. Y después, revisando, me dijo Alonso: “No, también hay estadísticas. Todas las mujeres, todos los hombres, antes de los 17 años tuvimos algún abuso o nos quisieron abusar”.

¿Cuándo se estrena Juicio a una zorra?

11 de julio al 31 de agosto, temporada en La Teatrería (Sala A), Ciudad de México.

Teatro
Juicio a una zorra (Foto: Cortesía)
DV Player placeholder

Tags


Lo Último